El bocadillo que vuelve locos a jóvenes y mayores
El equipo de El Quiosco de Down Experience

El bocadillo que vuelve locos a jóvenes y mayores

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Ante el éxito arrollador de su bocadillo de calamares, el Quiosco Down Experience ha tenido que aumentar horario y empleados.

Pensaban que su idea podía funcionar. Pero nunca imaginaron llegar a estar desbordados cuando solo llevan tres meses abiertos. «Se está vendiendo más de lo que calculamos. Por eso hemos tenido que reajustar las previsiones iniciales. Contemplábamos un escenario de 12 empleados y ya somos 19. Y también nos vimos obligados a ampliar el horario. Ahora estamos abiertos de lunes a sábado, de ocho de la mañana a once de la noche.

Sin lugar a duda, el bocata de calamares es el plato estrella. Es increíble. Lo piden chavales y mayores de 80 años que se toman el bocadillo felices. Hasta vino gente de Madrid y Barcelona que habían oído hablar de él», destaca Manuel Esmorís, vicepresidente de la asociación Down Coruña. Sí, porque el bocata, además de rico, es inclusivo.

Palacete con historial de bocadillo de calamares

El Quiosco Down Experience ocupa el palacete municipal situado en la plaza de Ourense. Es uno de los lugares más transitados de la ciudad. A lo largo de los años tuvo distintos usos y hace décadas se hizo popular, precisamente, porque despachaban unos bocatas de calamares que alegraban el estómago a trabajadores madrugadores y a jóvenes noctámbulos.

Cuando la asociación de Down decidió poner en marcha este proyecto hostelero se encontraron con una exigencia por parte de la alcaldesa de la ciudad: había que recuperar el legendario bocata.

Las dos premisas se cumplieron. El plato estrella ya saben cuál es y de los 19 empleados, 12 tienen discapacidades.

«Ese es el verdadero éxito. Le damos una oportunidad laboral a chicos que si no lo tendrían difícil y sirve de escaparate para que otros empresarios puedan ver las capacidades de estos chavales y pensar en contar con ellos para otros proyectos. El objetivo inicial no era ganar dinero, pero tampoco perderlo. Lo que no esperábamos es que, a los tres meses de abrir, estuviese dando beneficios. Lo bueno es que podemos seguir dando oportunidades a más gente gracias a las buenas cajas que hacemos», destaca Manuel.

Puedes leer la noticia completa en la web de La Voz de Galicia.